Arauca
¿Purga al interior del frente de guerra oriental del ELN?
En un informe especial de la Unidad investigativa del diario el tiempo se dio a conocer que tres guerrilleros del Ejército de Liberación Nacional (Eln) fueron asesinados por sus propios compañeros, acusados de robar plata proveniente del narcotráfico para comprar bienes en Colombia y Venezuela.
El periódico el pasado viernes señaló que los organismos de Inteligencia del Estado colombiano establecieron que Carlos Emilio Marín Giraldo, alias Pablito, integrante del Comando Central de esa guerrilla, junto con alias Nacho habrían ordenado la ejecución de tres de sus mandos a quienes les comprobaron que estaban utilizando las ganancias generadas por el tráfico de cocaína para adquirir inmuebles a título personal en ambos países.
El documento también está en manos de agencias federales de Estados Unidos, que actualmente tienen procesos abiertos contra once integrantes de esa agrupación por narcotráfico e incluso están ofreciendo 5 millones de dólares por información de Wílver Villegas, alias Carlos Puerco.
El fin de los guerrilleros ajusticiados por orden de ‘Pablito’ se inició en Venezuela cuando uno de ellos, identificado como Nahin Quintero, alias Alberto o Brazo de Reina, fue capturado junto con su amante por la Guardia Nacional de Venezuela.
‘Brazo de Reina’ se evadió del campamento en plena frontera, y el Eln dio aviso. Pocos días después de su detención fue entregado a alias Pablito junto con una lista de irregularidades, elaboradas por miembros de la Guardia Venezolana.
Allí se señala que adquirió varios bienes en el país vecino y que despilfarraba importantes sumas de dinero.
Pocos días después y tras permanecer amarrado, fue ejecutado el 14 de agosto de 2020 en el sitio conocido como Los Bancos, estado Apure, en Venezuela.
También fueron asesinados José Rubiel Ruiz Pamplona, alias Sierra, quien era el segundo cabecilla del frente Domingo Laín.
Este guerrillero fue ejecutado el 12 de septiembre de 2020, por los mismos hechos: apropiarse de dinero producto del tráfico de drogas. Para devolverle el cuerpo a su familia, el Eln puso como condición que fuera enterrado en Venezuela, en el cementerio Sucre, del estado Apure.
Finalmente, Hernando Silva Chapeta, considerado el hombre de confianza del frente de guerra Oriental, también fue ejecutado en la localidad de Los Bancos, estado Apure, luego de que lo delataron de hacer negocios particulares con miembros de organismos de seguridad de Venezuela, para beneficio propio y no de la organización guerrillera.
El documento, conocido en exclusiva por EL TIEMPO, concluye que alias Guanache, como era identificado Silva, era también el responsable de la desaparición de dos guerrilleros del Eln.
“Ordenaron la muerte de tres importantes mandos debido a problemas internos que afronta ese frente de guerra, derivados esencialmente por corrupción producto de malos manejos de dineros obtenidos por narcotráfico y otras actividades ilícitas”, subraya el documento de inteligencia.
Por ahora las autoridades no se han pronunciado frente a los documentos señalados por el Tiempo.